La vida de un rockstar es buena. Una vez me dijo Bonnz, de Hello Seahorse! que sería tonto no aprovechar que pueden entrar gratis a los lugares, que les regalan cosas y todo el trato VIP que les dan. ¡Y sí que lo sería! Pero el otro día me tocó presenciar un verdadero acto de rapiña.
Resulta que un grupo iba a tocar en una fiesta patrocinada por cierta marca, misma que los invitó a una de las boutiques que tienen para que los integrantes escogieran un outfit. Ellos comenzaron a ver todo la ropa, los tenis y, de pronto, el organizador de todo el asunto palideció. Llevaban artículos para todo su familia, incluso para el perro y la abuela, agarraban ropa sin verla (casi sin probársela). Evidentemente la cuenta iba a ser inmensa...
Un amigo que me acompañó dijo que "así son los rockstars, para ellos esto no es aprovecharse". Yo diferí. Así que, lector, si un día le toca invitar a una estrellita a algún lado, no se olvide de ponerle límites antes de que apañe y arrase.
Sus ojos son fuego
Hace 1 semana
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