Decadencia (total)

Su servilleta se enteró de una cosa muy mala: Laura Bozzo (no confundir con Bozo, el payaso -por más parecido que haya-) ha regresado a la pantalla chica con un talk show hecho a la medida de los televidentes más cultos y estudiados de México; peleas familiares, historias de telenovela y su acostumbrado grito feminista (ortodoxo) "que pase el desgraciado".

Lector, si quiere ser testigo de la decadencia de la industria televisiva en México, no dude en sintonizar el canal 2 de Televisa a eso de las 4 de la tarde. Usted encontrará una propuesta añeja, viciada, naca, pero eso sí, comprometida con hacer de éste un país mejor, como la conductora peruana (que por cierto estuvo meses arraigada en su país por problemas políticos) aseveró ayer.

Vale mencionar la cantidad de historias de maltrato, alcoholismo, machismo, violencia intrafamiliar y demás horrores de la sociedad que se tratan como si en unos cuantos minutos de discusión pudieran arreglarse.

Resulta risible escuchar a los "invitados" (que por supuesto deben estar contratados para hacer el ridículo en cadena nacional) quejándose amargamente de sus problemas. Lo peor es que se nota a leguas que les han dado un guión. Además, todo está acompañado de música para acentuar el sufrimiento o una deliciosa y común cumbia para darle punch al ya clásico "que pase el desgraciado".

Frases como: "odio a los hombres porque por culpa de uno un niño murió en mis brazos" o "¿por qué sigues con él si te masacra a diario" son parte del repertorio de una mujer que, no importa cuantas veces repita que trata de ayudar a la sociedad, tiene un tono tan vulgar, tan amarillo y tan desagradable que uno no sabe si reír o llorar. Además, ahora se hace llamar "señora" y no "señorita" como en emisiones pasadas de su chou (el título lo tiene más que merecido... nah).

Y no hablemos de los personajes que acuden al pánel, que bien podrían actuar en cualquier unitario o telenovela de la televisora (y mucho mejor que los protagonistas actuales de dichos programas). Pero mucho menos digamos algo de lo bajo que una empresa de medios puede caer para ganar rating (bueno, dinero).

Y si usted creía, asombrado lector, que esto era todo... ¡sorpresa! A la misma hora, pero en TV Azteca, la competencia: Niurka Marcos, reconocida cabaretera cubana, le da ángulos distintos a los temas de actualidad (como el caso Kalimba), con expertos invitados y toda la cosa. Sí, la vida siempre nos tiene algo más nefasto en puerta, y no, ése ni me atreví a verlo.